domingo, 2 de noviembre de 2008

Unidos para vivir y protegidos para crecer

Aldeas infantiles SOS busca resguardar el vínculo entre hermanos biológicos, que por diversas causas no pueden estar con sus padres. Para lograrlo, la organización brinda a los niños un hogar, de manera que crezcan protegidos en un ambiente familiar.

Niños que descienden del transporte escolar y corren hacia sus casas, otros que se preparan para salir rumbo al colegio, mamás que llegan de hacer las compras y otras que preparan el almuerzo. Éstas son algunas situaciones que se viven a diario en Aldeas Infantiles SOS Córdoba, cuando se acerca el mediodía.
Las sonrisas en los rostros de los pequeños no pueden disimular el cuidado, el cariño y la contención que reciben en este lugar. El motivo de su felicidad es el nuevo hogar del cual forman parte junto a sus hermanos biológicos, a sus hermanos del corazón y a su mamá del corazón.
Éste es el escenario, donde funciona ALDEAS INFANTILES SOS, en el Barrio Argüello Lourdes. El principal objetivo de esta Organización No Gubernamental de desarrollo social es ofrecer una familia a los niños privados del cuidado de sus padres, en condición de orfandad o que por algún motivo no pueden estar con sus familias biológicas.
De esta manera, la organización internacional otorga a los niños un hogar estable, para que crezcan con amor, respeto y dignidad, construyan vínculos duraderos y reciban una formación sólida hasta alcanzar una vida autónoma.
Actualmente, en la sede cordobesa hay 12 casas, cuyas familias están completas. Este complejo está cercado por seguridad y para propiciar la vida en comunidad Cada hogar tiene su propio ritmo y rutina, pero también se comparten experiencias comunitarias y las familias se ayudan mutuamente.

Cuidado de los vínculos afectivos

El Juzgado de menores de la Provincia de Córdoba presenta varias causas solicitando el ingreso de niños a la organización. “Se priorizan grupos de hermanos biológicos, de hasta 10 años de edad. Tienen que ser causas, donde no haya posibilidad ni a mediano ni a corto plazo de solucionar el problema familiar”, afirma Andrea Cuccarese, trabajadora social que integra el equipo pedagógico de la Aldea.
De este modo, se reúnen varios grupos de hermanos biológicos (generalmente nueve niños en total), con perfiles similares para convivir en un mismo hogar con una mamá. Paralelo a ello, se preserva el vínculo con la familia de origen, estableciendo un régimen de visitas.
Respecto al tiempo de permanencia de los niños en la aldea Cuccarese asegura: “No hay una edad límite para que se vayan, depende de los proyectos personales de cada uno (…) Mientras están trabajando o estudiando se los asiste económicamente hasta que puedan independizarse definitivamente”.

Ser mamá SOS: una opción de vida

Cada mamá asume una gran tarea: educar a niños que provienen de realidades distintas, enseñar hábitos, inculcar valores como la solidaridad, el respeto, la responsabilidad, ayudarlos en lo que necesiten y sobre todo brindarles cariño y protección.
A su vez, el referente estable de cada familia es la figura materna, quien administra un presupuesto mensual según las necesidades de los niños y recibe capacitación continua.
Durante 24 días seguidos las mamás están dedicadas al cuidado de sus hijos. Luego, descansan 7 días y en su reemplazo las tías se ocupan de los niños, continuando la misma línea de trabajo.
Al respecto, Lucía comenta: “Salgo de franco, pero estoy pendiente de ellos, los extraño mucho. Me doy cuenta que ellos también (…) Nosotros no somos institución, somos familia. Por eso digo mi familia”.

Potencialidades y oportunidades

Sólo a través del amor y la aceptación, la organización asegura que las heridas emocionales de los niños sanan y se desarrolla en ellos la autoconfianza. Partiendo de esta seguridad, cada uno descubre sus potencialidades y puede tomar sus propias decisiones.
En concordancia con ello, el Director de la Aldea Rubén Osvaldo Nausneris sostiene: “Lo más gratificante es ver la transformación de los chicos desde que ingresan hasta que se van. Les damos herramientas para que puedan adentrarse en la vida adulta en mejores condiciones que las de origen, para que puedan armar un proyecto de vida, conseguir trabajo, formar una familia. Buscamos identificar las necesidades de cada niño y en función de eso darle las mejores oportunidades.”

2 comentarios:

Anónimo dijo...

buenisima la idea de la organizacion! me parece muy bueno lo de poder ayudar a gente que tiene menos recursos o en este caso los chiquitos que no tienen la suerte de tener sus papas con ellos..en gral esta barbaro y es muy gratificante porder ayudar en este tipo de fundaciones o organizaciones..sobre todo fomentando que ellos entiendan que tienen una oportunidad de hacer cosas y que hay una realidad diferente a la que viven. aunq lamentablemente la respuesta de dignidad y de trabajo deberia venir de una realidad social mejor impulsada a traves de acciones gubernamentales..pero no desde el "solidarismo"sin sentido donde se les regale casas, recursos etc, ya que si ellos mismos no lo construyen tampoco lo van a valorar y peor aun no van a desarrollar la idea de que pueden salir adelante...quizas el ejemplo de los voluntarios y de estas organizaciones que siguen funcionando a pesar de todos los problemas del pais les haga abrir los ojos a los politicos y empiecen a trabajar de una buena vez por todas por la gente. segui dando a conocer este tipo de actividades mili! suerte con el blog un beso.

Maximo Cozzetti dijo...

Muy interesante y destacable. Saludos