La ciudad limpia, linda y ordenada aún sigue siendo una utopía

Cada cordobés que a fines del año pasado depositaba toda su esperanza en la actual gestión, hoy la ve defraudada. La ciudad limpia, linda y ordenada que prometía Giacomino como un buen deseo para comenzar en el 2008, hoy se esfuma en el smog que se respira en las calles de la ciudad capitalina.

Basta con recordar el saludo del Jefe de la Comuna, para darse cuenta que ya comenzado su mandato, los problemas no solo no se resuelven, sino que se multiplican.



El verde de la publicidad, es el verde que queremos conservar como pulmón para todos los ciudadanos. Parte de este recurso es cedido hoy a empresas privadas que buscan destruirlo para hacer redituable un proyecto, favorable tan solo para un puñado de cordobeses. El conflicto con los trabajadores de Cliba, la falta de políticas públicas para eficientizar la recolección de residuos, la polémica por la concertación público-privada con el grupo Edisur, la deuda con los trabajadores de la Cultura y el mal estado de los centros culturales municipales, son algunos de los problemas que ocupan las primeras planas de los medios gráficos y que constituyen material seguro a la hora de pautar un noticiero.

A raíz del conflicto originado días atrás por la deuda acumulada con la empresa Cliba, el periodista Jorge Kelly en su tradicional editorial radial, no dudó en cargar contra la actual gestión y asegurar que algo está oliendo mal en la Municipalidad. No es precisamente la basura lo que desprende un aroma poco agradable, sino la posible municipalización de otro servicio: la recolección de residuos.


(Editorial de Jorge Kelly del día 28/10/2008)

El problema de la basura es de larga data en Córdoba, y más allá de ser un problema arrastrado por funcionarios antecesores, también en parte es atribuible a una costumbre cultural de los cordobeses, que poco entienden de limpieza y cuidado por su ciudad.