FOPEA es una organización que nació en el 2002 y que actualmente nuclea a más de 220 profesionales de medios y profesores de periodismo en Argentina. Se trata de un espacio de reflexión y de diálogo cuyos pilares son el mejoramiento de estándares éticos y la calidad de la profesión, en defensa de la libertad de expresión.
“Intentamos que el periodismo argentino, que tanto ha hecho en estos veinte años por mejorar la vida comunitaria, también esté a la altura, en los próximos veinte, de lo que la sociedad necesita”, expresa la organización en su
sitio web.
Mapa de agresiones
El panel seleccionado para dictar la conferencia estuvo conformado por miembros de FOPEA, quienes llevan adelante un monitoreo sobre la libertad de expresión en distintas provincias del país. Mónica Baumgratz explicó que el programa es “un servicio de protección a los periodistas” y su objetivo es hacer públicas las agresiones que tanto los periodistas, como los medios, sufren en el ejercicio de su profesión. También, advirtió que existe mucho silenciamiento por temor de los profesionales y que la organización forma parte de una red internacional de alertas de ataques a la libertad de expresión.
Baumgratz explicó que a partir de las investigaciones rigurosas que llevan a cabo en el Foro, detectaron que las agresiones más recurrentes tienen que ver con:
- Ataques físicos.
- Presión de la pauta publicitaria pública o privada.
- Jackeo de sitios.
- Cambios en los puestos de trabajo por diferencias ideológicas.
A su vez, los distintos casos en estudio revelaron que frecuentemente el agresor es anónimo. “Hay pocos que dan la cara cuando atacan”, expresó Baumgratz. Y entre los agresores conocidos los más frecuentes son la fuerza pública y el poder político (funcionarios de Gobierno, concejales, legisladores del Interior, entre otros).
Limitaciones de periodistas en distintas provincias
RÍO NEGRO. El panelista Hugo Alonso del Diario de Río Negro, explicó que la publicidad estatal es el principal condicionante de la provincia. En un momento, se promulgó una ley para regular la distribución de la pauta oficial, pero terminó siendo un “proyecto tapón”, que nunca se concretó. Esta situación genera que los medios oficialistas encasillen a todos los demás como contraoficialistas, generando una fuerte presión para el ejercicio de la profesión.
CATAMARCA. Alejandra Saravia, del diario El Ancasti de Catamarca, manifestó que en la provincia existen más periodistas en el sector estatal, trabajando para comunicados de prensa, que en el sector privado. Algunos trabajan en ambos lugares y limitan el ejercicio de la profesión de otros colegas. A su vez, el poder económico es otro factor de presión. Por ejemplo, en el caso del conflicto con las minerías, la gente reclamaba la falta de un canal de expresión y por eso agredían a los periodistas.
SAN LUIS. Oscar Flores, de la Radio Universidad de San Luis comenzó su exposición alarmado por la situación política de la provincia, que desde el año 83 está gobernada por los hermanos Rodríguez Saá. Contó que el Estado obliga a quienes ganan licitaciones para distintas obras de infraestructura a pautar en el diario principal de San Luis, que es un medio oficial. Además, explicó que el plan Autopista de la información, destinado a otorgar conexión a Internet gratuita para toda la provincia, no es tan libre como se anuncia. Los medios digitales que se pronunciaron en contra del Gobierno, fueron excluidos de la autopista de la información, con lo cual la censura se expandió a la web.
CÓRDOBA. Juan Carlos Simo de La Voz del Interior expresó que en Córdoba desde hace unos años los casos más frecuentes tienen que ver con agresiones físicas (como las ocurridas con periodistas en manifestaciones del 2008 por la reforma previsional), conflictos gremiales y agresión policial.
Para ampliar el conocimiento sobre la situación en otras provincias, FOPEA ofrece un
mapa en su sitio web con los casos en estudio.
Mejor que antes
Como reflexión final, desde FOPEA sostuvieron que lejos de asustar a los presentes con el panorama expuesto, “la Argentina está en un muy buen momento de libertad de expresión”.
Las vías de comunicación con la organización, ante algún caso que atente contra el ejercicio de la profesión periodística, son: monitoreo@fopea.org o el teléfono 0-800-666-4822.
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