lunes, 17 de agosto de 2009

Facebook: vidriera de identidades y apuesta a la publicidad

“En Facebook espigamos trozos de identidad (…). Somos espigadores. Como buenos espigadores, seleccionamos y recolectamos la cosecha de nuestra comunidad”. En estas frases se resume el video elaborado por los alumnos del Taller de Procesamiento de Datos, dictado en la Carrera de Ciencias de la Comunicación, en la Facultad de Ciencias Sociales de la UBA. El titular de la cátedra es Alejandro Piscitelli y este año particularmente los alumnos trabajaron en el Proyecto Facebook, investigando el fenómeno que tomó fuerza en la Argentina desde el año pasado.

La repercusión que genera cada participación de los usuarios en esta red social es quizás uno de los aspectos más atractivos del mundo virtual/real que propone Facebook. En este espacio el feedback entre los contactos es permanente. Un amigo sube una foto, otro la comenta. Un amigo enlaza una nota o un video, y por detrás varios contactos dejan sentada su aprobación o su rechazo. Alguien crea un grupo con un valor o un interés que despierta atracción y entonces con un click uno se hace fan de esa comunidad virtual, deslizando una característica personal.



En FB elegimos nuestros amigos, generalmente nos mostramos con fotografías o con frases que expresan nuestro pensamiento. Dejamos picando ideas, nos unimos a grupos de interés, damos a conocer las cosas de las cuales somos fanáticos, dejamos que una aplicación nos anticipe algún suceso y opinamos al respecto, expresamos nuestro estado de ánimo, contamos si estamos en una relación, quiénes son nuestros amigos más cercanos, cuáles son nuestros planes o algo que nos enojó.

A través de esta red social, podemos saber en qué anda un amigo que hace años que no vemos o intercambiar mensajes con incógnitas que sólo comprende un amigo cercano. También podemos encontrar novedades de profesionales, que de otro modo no nos enteraríamos, sugerencias de sitios para visitar y alguna que otra animación que nos sorprende por revelarnos algo de nuestros contactos.


Con esta variedad de usos que ofrece la red social, sumado a su potencial por ser una vidriera de identidades que revela gustos, preferencias, comportamientos, pensamientos, actitudes, proyectos, valores e intereses, la publicidad encuentra un nuevo sitio para explotar. Desde ahora, en Facebook existe una aplicación para publicitar una página de Internet, un evento o un grupo constituído dentro de esta red.

El usuario diseña su propio anuncio, segmenta su público (gracias a filtros demográficos y psicográficos), decide la circulación de su campaña y si quiere pagar por número de clicks o por visualización del anuncio. Una vez ingresado el pedido, pasa por una revisión de calidad, en la que se comprueba que se respeten las normas de contenido. Además, FB ofrece sugerencias para mejorar el anuncio y una evaluación de seguimiento de la campaña.

Habrá que ver ahora que apuesta hacen las empresas por este tipo de publicidad en una red que no para de crecer y de instalarse cada vez más entre los hábitos y costumbres de los internautas.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Milagros! Muy claro y muy bueno tu articulo. Particularmente me muestro reacio a su utilizacion, por miedo a revelar mis datos, gustos o preferencias. Como bien dijiste, es una vidriera de identidades... Quizas es miedo a lo nuevo o un rechazo fundado en que me parece solo otra forma de publicidad. Pero por otro lado, creo que cada usuario le puede dar el uso que prefiera. Se puede perder el tiempo o tomarlo como una poderosa herramienta de comunicacion. Espero encontrarle valor en este ultimo sentido y que esta vez Laura no me contradiga... Saludos!

Maximo Cozzetti

Anónimo dijo...

Yo les avisé antes... ese red es una mega base de datos. ¿Quiénes tienen toda es información en sus manos a parte de los publicistas? Pese a que me asusta la idea de que gente X tenga mis fotos y sepa lo que hago, lo que consumo y lo que pienso. No pude resistirme mucho tiempo y soy un usuario más de facebook... no por elección sino por imposición (Un periodista no puede estar afuera de una red social tan importante).

Juan